El Zorro de Canyamars: Un día en el parque!!

Amenudo me pregunto, si es la persona la que escoge el sitio donde vivir o es el lugar el que elige a las personas que vivirán en el.
Aunque estuve allí antes de aquella vez, la primera vez que recuerdo haber estado en Canyamars con claridad tenía la edad de Javier y no lo olvidaré en la vida...tremenda colleja me dieron!!!!
Montado en mi inolvidable Montesa cota 49 pase la tarde yo solo disfrutando de los infinitos caminos que nos ofrece el hoy ya parque del Montnegre-El Corredor, las horas fueron pasando casi sin darme cuenta hasta anochecer y en un momento me encontré en la mas tremenda oscuridad en mitad del bosque, casi sin gasofa y con un faro de los de antes que mas que luz daba una chispa.

Mi primera intuición me indujo a bajar la montaña confiando en llegar a Llavaneres de donde había salido horas antes, pero una vez mas el destino me llevo al lado contrario de la montaña, a un lugar totalmente desconocido por mi, por fin a lo lejos vi aparecer una Masía que parecía estar habitada y me dirigí a ella confiando que me enseñarían el camino a seguir para llegar a mi casa.

Al llegar a la puerta encontré un señor de avanzada edad descargando leña de una vieja furgoneta Citroën, ni corto ni perezoso me acerque a el y le pregunte:

Vaig bè per anar a Llavaneres?

Y sin mediar palabra.........Zas!!!!! colleja que te crió seguido de un:

Mecagun la mare que em va parir, es pot saber que collons fàs tu SOL en mig del no rés? Els teus pares
t'estaràn buscant per tot arreu. Va puja la moto al cotxe que et porto a casa teva y que no es torni a repetir!!!!

Era el dueño de la conocida en Canyamars como Masía Can Rimbles, ahora convertida en restaurante y que muy amablemente me acompañó a casa, menuda bronca me cayó al llegar. A aquel señor no le volví a ver ya que hasta años mas tarde y siguiendo sus "consejos" no volví a pasar por allí. D.E.P

Años más tarde y debido a que mis Jefes tenían una casa allí, fui conociendo cada vez mejor este maravilloso pueblo que es Canyamars y durante mucho tiempo tuve la premonición de que tarde o temprano yo también viviría allí rodeado de paz y naturaleza en una masía como la de Can Rimbles y así fue, Cal Pegaire se convertiría hace unos años en nuestro hogar!

A tan solo unos metros de Cal Pegaire está la entrada a unos de los accesos al parque del Montnegre - El Corredor, el lugar es ideal par comenzar una buena excursión en moto y así lo hacemos cada vez que tenemos ocasión además de tener unas zonas de trial magnificas a la vuelta de la esquina.